... And I miss him... Cómo no echarlo de menos!, cómo no echar de menos al compañero de risas y de llantos. Compañero diario de discusiones y de celebraciones durante los últimos tres años. Suerte que me rodean buenos amigos que me ayudan a llevarlo mejor. Amigos (y por amigos también incluyo a mi maravilloso hermano, porque es el único que tengo y porque es el mejor del mundo!) a los que les ha faltado tiempo para acudir raudos en cuanto intuyeron que precisaba compañía. Amigos de siempre que me ayudan a tenerme en pie y que, si alguna vez me caigo, son los primeros en tender la mano para que me levante.
Toda persona debería tener amigos así por prescripción facultativa. La famila te toca, pero estos amigos... son un premio gordo de la lotería!!
Y mientras mi amor disfruta de unas merecidas vacaciones junto a su familia, dejándose mimar por los suyos y reencontrandose con sus recuerdos, yo intento centrarme y hacer algo útil ahora que mis días son una sucesión de horas libres... Tengo tooodo el tiempo del mundo para ocuparme de mi investigación y para ponerme al día con las oposiciones.
Pero estoy vaga. La pereza me invade y, lo que es peor, trato de autojustificarme tiñendo ese sentimiento de melancolía.
Sí, es cierto, el día que se fué tuve un "bajonazo" anímico, pero ya estoy recuperada. Él está bien, se está "jartando" de fiestas de bienvenida y de la hospitalidad propia de su pueblo (la teranga), así que se me agotan las excusas para estar sin hacer nada... Me pondré las pilas!! (por ahora, el único esfuerzo mental que he realizado ha sido el de intentar memorizar los pasos para hacer una pizza casera!!! Qué estrés!!!)
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