jueves, 24 de diciembre de 2009

Deux est Machina

"Deus est Machina" es una expresión de origen latino que se aplica en especial para el teatro griego aunque también se ajusta hoy en día para todas aquellas historias sean de cine, teatro o televisión que tengan “desenlaces” sorpresivos en el que intervenga algún ser o hecho sobrenatural, que no guarde relación lógica con la fábula (entramado de hechos) de determinada historia.
En el teatro griego se acostumbraba a colocar al protagonista (o también al resto de personajes), en situaciones difíciles que se iban agravando a lo largo de la obra con el propósito de crear la emoción, el suspenso en su público. En muchas obras, la complicación a la que el protagonista era sometido era tan grande, que el autor al parecer no encontró otra salida que la de hacer descender a un Dios para que resolviera todo el conflicto de la historia. En Grecia, este supuesto Dios (Deux) que descendía, bajaba al teatro por medio de una máquina (Machina) y la historia obtenía un final feliz, fácil, que conmocionaba al público de la época.
Los romanos añadieron el Deux est Machina en sus obras, así como luego lo hicieron varios dramaturgos como Molière en Tartuffo. En la actualidad, vemos en muchas películas y telenovelas que el Deux est Machina lo resuelve todo.

1 comentario:

  1. aun en Israel, pais en donde se habla el Hebreo y no ningun idioma que este cerca del Latin, se usa esa frase, por lo general gente que estudio en la Universidad, y que sabe citar proverbios en otros idiomas que no sea necesariamente el Hebreo.

    ResponderEliminar