Ha sido un lunes durillo...

Ourense es un sitio duro para vivir por sus temperaturas extremas, que confieren sin embargo un carácter estable a los ourensanos.
Es una apreciación totalmente personal y por supuesto cuestionable y rebatible, pero lo digo a modo de halago.

Pasar tanto frío en invierno para inmediatamente achicharrarte de calor en verano debe provocar un efecto similar al templado del acero.

Los que somos de costa y de climas más "templados", paradójicamente somos más inestables, tenemos mas altibajos, montañas rusas emocionales con subidas más pronunciadas y bajadas en picado...

Ayer me entrevisté con la directora de mi tesis. Fué "mejor" de lo que esperaba, en lo que al trabajo en sí se refiere. He hecho un buen trabajo (porque me lo he currado bien) y ella tuvo un trato agradable y correcto conmigo (sé que pensareis que, ¡faltaría más!, pero si yo os contara cómo trata a otras compañeras...)

Sin embargo, salí decepcionada, cabreada y triste de la reunión.

Yo creía que las cosas funcionaban de otra manera.

Que por libertad de cátedra se referían al culmen de la libertad de expresión y sin embargo, he comprobado que solo se refiere a la legitimación de pequeñas dictaduras que cada profesor puede instaurar en el interior de sus aulas.

Las dos horas de nuestra reunión se centraron (una vez comprobado a vista de pájaro que el trabajo estaba bien planteado) a "adornarlo", a poner un índice bonito, a redactar un prólogo impactante y, sobre todo, sobre todo, a confeccionar una portada llamativa en la que figurase en en letras bien grandes... su nombre...

En fin, una mierda todo. El parecer es mas importante que el ser.

De vuelta a casa, sufrí una pequeña crisis personal. Fué como una revisión de la hipoteca. De pronto, revisé mi vida. ¡¿Qué coño estoy haciendo con ella!?

¿Para qué me mato haciendo un doctorado que no me llevará a ninguna parte? (porque en las universidades, el pescado ya está repartido. Es una institución tan endogámica que solo te permiten entrar como se hace en los clubs super-secretos, solo puedes acceder si alguien "te invita". Y no es mi caso)

Ya he estudidado, llevo años realizando cursos y estoy bien formada... ¿Por qué continúo sin parar?

¿Por qué no dedico el tiempo a hacer algo que realmente me guste?: viajar, leer, tomarme cañas con los amigos...

Una idea debastadora atravesó mi cabeza: ¿Estoy saboteando mi propia vida?. Posponiendo tanto las cosas que me hacen feliz con obligaciones y tareas que yo misma me busco y me distraen que me voy alejando poco a poco de la verdadera obligación que todos/as tenemos: la de ser felices. La de diseñar un proyecto vital (adaptado a tus posibilidades, por supuesto) que te guste y te haga sentir realizado/a.

No se puede dejar todo "pa luego", que el tiempo vuela...

En fin, lo dicho, un lunes duro, del que espero haber sacado algo en claro...